El Santo Padre advirtió sobre los “problemas preocupantes” que acompañan los avances en la inteligencia artificial (IA), especialmente la inteligencia generativa, y pidió un “marco ético” para este desarrollo tecnológico.
“La IA, especialmente la generativa, abrió nuevos horizontes en muchos niveles diferentes, incluido el mejoramiento de la investigación en salud y los descubrimientos científicos, pero también plantea preguntas inquietantes sobre sus posibles repercusiones en la apertura de la humanidad a la verdad y la belleza, en nuestra capacidad distintiva de comprender y procesar la realidad”, escribe el papa León XIV, en un texto publicado por el Vaticano y dirigido a los participantes en la Segunda Conferencia Anual de Roma sobre Inteligencia Artificial (19-20 de junio).
El encuentro concluye hoy en el Palacio Apostólico del Vaticano.
“Reconocer y respetar lo característico del ser humano es esencial para la discusión de cualquier marco ético adecuado para la gobernanza de la IA”, argumenta el pontífice.
El mensaje papal subraya la “urgente necesidad de una reflexión seria y un debate continuo sobre la dimensión inherentemente ética de la IA”.
El Papa nos invita a “tener en cuenta el bienestar de la persona humana no sólo materialmente, sino también intelectual y espiritualmente”.
Significa salvaguardar la dignidad inviolable de toda persona humana y respetar la riqueza y diversidad cultural y espiritual de los pueblos del mundo. En última instancia, los beneficios o riesgos de la IA deben evaluarse con precisión según este criterio ético superior, añade