ROYON ASUMIÓ LA PRESIDENCIA DE LA ORGANIZACIÓN LATINOAMERICANA DE ENERGÍA

La secretaria de Energía, Flavia Royon, asumió  la presidencia la Organización Latinoamericana de Energía (OLADE) y reafirmó la voluntad argentina de profundizar la integración energética regional.
   “La Argentina asume esta responsabilidad con el firme compromiso de trabajar de manera conjunta con todos los estados miembros y con miras a afianzar a este organismo regional”, expresó al asumir el cargo en un acto realizado en Montevideo, Uruguay.
   Royon subrayó que el país contribuirá con los objetivos de descarbonización regional y resaltó “la vocación de la Argentina por la integración energética regional se ve plasmada en obras concretas de gran impacto para las naciones de nuestra región”.
   Destacó que la Argentina avanzará con “el proyecto de infraestructura energética más importante y ambicioso de las últimas décadas: el Gasoducto Presidente Néstor Kirchner y sus obras complementarias”.
   “Estamos avanzando con el tramo del gasoducto Mercedes– Cardales, las obras de reversión del Gasoducto del Norte, y el tramo Salliqueló-San Jerónimo, que permitirán la interconexión de los sistemas del norte y sur del país, la sustitución de las importaciones de GNL, y nos habilitará a exportar a Brasil, Chile y Uruguay”, precisó.
   La secretaria repasó las obras de infraestructura energética que conectan a la Argentina con los países limítrofes como el Oleoducto Trasandino (OTASA), que permitió exportar crudo a Chile después de 17 años y la inauguración de la línea eléctrica de Alta Tensión Juana Azurduy, que conecta a la Argentina con Bolivia y la central hidroeléctrica binacional Yacyretá con Paraguay.
   “Es indudable que la Argentina contribuirá decididamente a los procesos de transición de nuestra región, mediante exportaciones de gas natural, o su variante GNL, colaborando así con la descarbonización y fortaleciendo el proceso de integración regional de nuestros pueblos”, afirmó la funcionaria argentina. .
   Royon reafirmó la posición nacional de sus legítimos derechos de soberanía sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur, Sándwich del Sur y los espacios marítimos circundantes, así como su soberanía permanente sobre sus recursos naturales, de acuerdo con el principio de integridad territorial.