El papa Francisco designó a un arzobispo argentino en un importante cargo en el Vaticano y estará encargado de ejercer la “tutela de la integridad de la doctrina católica”.
Se trata del arzobispo de La Plata, Víctor Manuel Fernández, quien fue nombrado como nuevo prefecto del Dicasterio por la Doctrina de la Fe.
El prelado cordobés ocupará el segundo dicasterio en importancia en el Vaticano, que ejerce “la tutela de la integridad de la doctrina católica”.
Fernández, de 60 años, reemplazará al jesuita español Luis Ladaria Ferrer, quien superó el límite de 75 años para ejercer cargos en la Curia.
“Como nuevo Prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe te encomiendo una tarea que considero muy valiosa. Tiene como finalidad central custodiar la enseñanza que brota de la fe para dar razón de nuestra esperanza, pero no como enemigos que señalan y condenan”, manifestó el Sumo Pontífice en una carta que le envió al arzobispo platense.
El Dicasterio para la Doctrina de la Fe tiene como función “ayudar al Romano Pontífice y a los obispos a proclamar el Evangelio en todo el mundo, promoviendo y tutelando la integridad de la doctrina católica sobre la fe y la moral, sobre la base del depósito de la fe y también buscando una comprensión cada vez más profunda de esta ante los nuevos interrogantes”, según se desprende del artículo 69 de la Constitución Apostólica “Predicar el Evangelio”, que entró en vigencia el año pasado.
“El Dicasterio que presidirás en otras épocas llegó a utilizar métodos inmorales. Fueron tiempos donde más que promover el saber teológico se perseguían posibles errores doctrinales. Lo que espero de vos es sin duda algo muy diferente”, expresó el Papa.
En la misiva, Francisco aclaró: “Dado que para las cuestiones disciplinarias – relacionadas en especial con los abusos de menores – recientemente se ha creado una Sección específica con profesionales muy competentes, te pido que como Prefecto dediques tu empeño personal de modo más directo a la finalidad principal del Dicasterio que es ´guardar la fe´”.