La Unión Tranviaria Automotor (UTA) levantó esta noche el paro de colectivos que había dispuesto horas antes para la región del AMBA al no llegar a un acuerdo con las autoridades nacionales y las empresas del sector, luego de una extensa reunión que duró varias horas.
La medida finalmente quedó sin efecto debido a que el Ministerio de Transporte de la Nación garantizará la suba salarial que reclama la UTA, aunque en el interior del país la huelga quedó ratificada.
El incremento fue dictaminado a través de un decreto conjunto de la cartera de Trabajo y de Transporte.
La noticia se dio a conocer a última hora de este lunes cuando ambos ministerios emitieron una Resolución Conjunta “excepcional”, a partir de la cual se acordó “el pago de los trabajadores y los servicios de transporte automotor del AMBA, de jurisdicción nacional”.
En cuanto a la situación del interior, Transporte ratificó que ya se hizo el pago del fondo compensador dispuesto por la ley de presupuesto, pero en esta parte del país el paro será inevitable.
La huelga iba a comenzar a las 0:00 del martes y se prolongaría durante todo el día, aunque el gremio disidente, compuesto, entre otros por el Grupo DOTA, Autobuses Buenos Aires, empresa Yitos y las líneas 80 y 257, aseguró que no se iba a plegar a la medida de fuerza y trabajaría normalmente.
Se trata de unas 90 líneas que apoyan a la Lista Azul, contraria a la gestión de Roberto Fernández en la UTA, y que tanto en la región del AMBA y del interior del país prestarán servicio sin interrupciones.
La medida de fuerza iba a afectar a las líneas de corta y media distancia que circulan tanto por el interior como por el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
La determinación se había producido en medio de un conflicto que se inició hace varios meses en reclamo de un aumento salarial, razón por la cual este lunes el sindicalista volvió a reunirse con funcionarios del Ministerio de Trabajo y con las cámaras empresarias del sector, pero las negociaciones no habían prosperado.
En esta oportunidad, la cartera laboral, encabezada por Raquel “Kelly” Olmos, ya no pudo exigir la extensión de la conciliación obligatoria que regía hasta el momento, por lo que el cese de actividades de los colectiveros era inevitable.
De todas maneras, se dispuso un “cuarto intermedio” para volver a dialogar el miércoles 14 de junio a las 13:00, aunque el gremio aclaró que iba a llevar a cabo el paro por 24 horas.
La UTA exigía cobrar un incremento retroactivo para que el básico desde abril último sea de 262 mil pesos, además de un bono por única vez y no remunerativo de otros 32 mil pesos y viáticos diarios para todos los trabajadores del sector.
“A las compañeras y los compañeros del transporte de pasajeros, informamos que en atención al fracaso de la última audiencia en el Ministerio de Trabajo, en la que las empresas se niegan a acordar un aumento salarial conforme el incremento de la inflación y en el que tanto las autoridades del Ministerio de Transporte de la Nación, como del resto de las provincias del interior y la Ciudad de Buenos Aires se han encontrado ausentes, de no acordarse los salarios para el personal representado para la próxima audiencia el día lunes, ratificamos un paro por 24 horas en empresas de Corta y Media distancia de todo el país, desde las 00 horas del día martes 13 del corriente mes”, había anticipado el gremio la semana pasada.
El sindicato precisó que “la medida de fuerza es empujada por quienes tienen la responsabilidad de solucionar la grave crisis en la que están poniendo al transporte, afectando a los 10 millones de usuarios diarios del AMBA y 9 millones en el interior del país”.
En tanto, a última hora de este lunes, el Ministerio de Transporte anticipó que junto a la cartera de Trabajo emitirían una Resolución Conjunta “excepcional”, a partir de la cual “se asegurará el pago de los trabajadores y los servicios de transporte automotor del AMBA, de jurisdicción nacional”.
En cuanto a la situación del interior, el Ministerio de Transporte de la Nación ratificó que ya se hizo el pago del fondo compensador dispuesto por la ley de presupuesto, pero en esta parte del país el paro sería inevitable.