Un incendio se declaró en el depósito del barrio porteño de Barracas que perteneciera a la empresa Iron Mountain, en el que en 2014 se produjo otro hecho similar que terminó en tragedia con el fallecimiento de ocho bomberos y dos agentes de Defensa Civil.
El siniestro, que incluía llamas de importante altura, se originó en las instalaciones situadas en Jovellanos al 1.200, en la esquina de Quinquela Martín.
El incendio del 5 de febrero de 2014 en las instalaciones en las que funcionaba la empresas informática derivó en que se derrumbara una pared, provocando el deceso de diez personas que trabajaban en la emergencia y la Justicia concluyó que fue un hecho intencional.
El titular del SAME, Alberto Crescenti, sostuvo este lunes que el fuego tomó casi la mitad del predio y, en declaraciones al canal TN, enfatizó que “gracias a Dios esta vez no tenemos que lamentar víctimas, aunque admitió cayendo la tarde que persistía el peligro de derrumbe en algunas de las paredes.
Desde horas del mediodía trabajaban en el lugar una decena de dotaciones de bomberos de distintos cuarteles porteños.
El trágico incendio del 5 de febrero de 2014 comenzó a las 8 de esa jornada.
Tras iniciarse las tareas para extinguir el incendio, un grupo de bomberos ingresó al predio por la calle Azara, mientras que otra unidad trabajaba sobre el acceso de Melchor Gaspar de Jovellanos.
Pasadas las 9, la pared que daba a la calle Jovellanos se desplomó encima del comisario inspector Leonardo Day; la subinspectora Anahí Garnica; los cabos primero Eduardo Adrián Conesa y Damián Véliz; el cabo Maximiliano Martínez; y el agente bombero Juan Matías Monticelli, quienes fallecieron en el acto junto a los bomberos voluntarios José Luis Méndez Araujo y Sebastián Campos, y el rescatista Pedro Báricola, de Defensa Civil del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
Además, resultaron gravemente heridos los bomberos Daniel Díaz Gauna, Juan Manuel López Gaggiotti y Facundo Ambrosi, quien murió días después, el 17 de febrero, como consecuencia de múltiples traumatismos.
Unos meses después, el 28 de abril de 2014, personal de la Guardia de Auxilio y Emergencias del Gobierno de porteño comenzó a desmantelar los escombros del depósito y las labores se extendieron debido a que se realizó “por capas”, mientras se enviaba a peritar el material recolectado.
En febrero de 2015, peritos de la División Siniestros de la Policía Federal y del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) presentaron sus informes periciales, en los que se concluía que el incendio podría haber sido intencional.
En diciembre pasado, la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional, por mayoría, confirmó los procesamientos de los 17 imputados en la causa en que se investiga el incendio.
La decisión judicial fue tomada por la Sala VI de la Cámara, que además revocó los sobreseimientos de tres de los involucrados, procesó a uno de ellos y dictó la falta de mérito en relación a los dos restantes, según publicó el Ministerio Público Fiscal de la Nación.