La niña de 11 años que murió el último lunes en el hospital Penna de la Ciudad de Buenos Aires tras una descompensación en una escuela sufrió una “neumonía bilateral” cuyo origen está siendo investigado.
No obstante, el primer informe médico indica que la pequeña tenía “buen desarrollo óseo y muscular, en regular estado de nutrición”.
Además, el examen traumatológico arrojó que el cuerpo “no presentaba lesiones”.
El parte fue difundido por el Ministerio Público Fiscal. La causa está siendo investigada por la fiscal Silvana Russi y por el juzgado de Instrucción número 14, a cargo del juez Darío Bonnano.
“La fiscalía recibió hoy el informe de autopsia, practicado por Héctor Enrique Di Salvo, integrante del Cuerpo Médico Forense de la Corte Suprema, quien concluyó que la muerte de la niña fue producida por neumopatía bilateral”, explicó el parte oficial.
“Del examen antropométrico surge que presentaba buen desarrollo óseo y muscular, en regular estado de nutrición”, añade el reporte.
Los datos parecen desmentir las versiones que indican que la niña sufrió una descompensación producto de un estado de desnutrición.
Esa supuesta situación fue denunciada públicamente por allegados a la familia de la pequeña e incluso por docentes y no docentes, pero de momento no encuentra corroboración en la investigación judicial.
Para completar la investigación inicial, “se han dispuesto estudios histopatológicos, de laboratorio químico y toxicológicos”.
“La investigación se encuentra en pleno trámite, habiéndose ordenado la realización de diversas medidas probatorias”, añadió el documento.