ENTIDADES RECHAZAN EL FIDEICOMISO PARA TRIGO Y MAÍZ QUE IMPULSA EL GOBIERNO

La Bolsa de Cereales y la Asociación de Maíz y Sorgo Argentino (MAIZAR) rechazaron la intención del gobierno de implementar un fideicomiso para trigo y maíz al señalar que “no beneficiará a los consumidores” y le reclamaron que trabaje para bajar la inflación.

   Ambas entidades fijaron su rechazo tras mantener una reunión con el secretario de Comercio Roberto Feletti, y reclamaron subsidiar la demanda para beneficiar a los consumidores.

   Para frenar la inflación el Gobierno busca lograr desacoplar los precios internacionales con los del mercado local para amortiguar su impacto en la producción de alimentos a través de un fideicomiso.

   Ese mecanismo consiste en que el sector exportador aporte alrededor de USD 25 millones que serán destinados a congelar los precios internos de los fideos y la harina.

   La Bolsa replicó que “la implementación de medidas de similares características en la historia reciente de nuestro país no fueron eficaces para contener los precios de los productos de la canasta básica que perseguían como objetivo”.

   En un comunicado la entidad señaló que “no existen problemas de abastecimiento e insistir en que la incidencia del maíz y del trigo en el precio al consumidor de los productos procesados es muy limitada y cualquier mecanismo de compensación no va a generar beneficios para el consumidor nacional”.

   Le reclamó al gobierno que “trabaje sobre las reales causas de la inflación que exceden al precio del maíz o del trigo, los cuales estuvieron siempre por debajo del ritmo inflacionario durante todo el 2021”.

   El comunicado pide al gobierno que “promueva una serie de medidas que incluyen desde la utilización de mecanismos de cobertura, financiación, y, fundamentalmente, propuestas para llegar a los sectores más vulnerables, a través de tarjetas de alimentos”.

   Por su parte MAIZAR sostuvo que el fideicomiso “actúa como una retención encubierta, que se suma a las actuales y al tipo de cambio, que ya generan un desacople significativo con los precios internacionales, afectando la rentabilidad del productor y produciendo una caída de la producción”.

   La entidad sostuvo que el Gobierno “debe trabajar sobre las causas reales de la inflación” y sostuvo que es bajo “el impacto que tiene el costo del maíz sobre los precios de los productos finales en góndola”.

   “Resulta absurdo que el productor de maíz deba subsidiar productos que ni siquiera están vinculados a su cadena de valor” agregó MAIZAR en un comunicado.

   Agregó que debido a la crisis económica “no tiene sentido implementar normativas que van en contra del desarrollo productivo federal y del empleo genuino”.

   “Es enorme la oportunidad que tenemos hoy los argentinos para crecer a partir de la producción de maíz y de sorgo y su transformación en múltiples productos sostenibles que hoy demanda el mundo” añadió el comunicado de MAIZAR.