El secretario de Energía, Darío Martínez, prometió que las tarifas de servicios públicos subirán por debajo de la inflación el año próximo, para que los trabajadores “puedan recuperar capacidad de consumo”.
El funcionario dijo que el objetivo es que en el 2022, el aumento de tarifas “no afecte los salarios”, tras una reunión mantenida con el jefe de Gabinete, Juan Manzur.
Señaló que las tarifas se ajustarán de acuerdo con el presupuesto, con el objetivo de que los trabajadores “puedan recuperar capacidad de consumo y seguir destinando parte de sus ingresos a la adquisición de bienes y servicios”.
Martínez remarcó que se espera que con el Presupuesto 2022 las personas “puedan seguir destinando parte de sus ingresos a adquirir bienes y servicios, porque esa es la reactivación que la Argentina necesita”.
El proyecto de presupuesto 2022 contempla un aumento del 30% de las tarifas eléctricas, por la disminución de subsidios, aunque es probable que sea un poco mayor, ya que restan calcular las subas de las distribuidoras eléctricas.
Al referirse a los reclamos de empresas productoras de hidrocarburos, Martínez detalló que la decisión del gobierno “al lanzar el plan Gas.AR permitió dar previsibilidad y seguridad jurídica, y por eso está dando buenos resultados”.
Consideró que esa medida “frenó el decline del 8,5% que se registraba y ahora estamos con aumento de la producción” de gas.
“Las empresas entienden que hay previsibilidad y reglas claras, confían, y vuelven a invertir”, aseguró.
Martínez añadió que “con la ley de promoción de inversiones lo que queremos hacer justamente es trasladar esas inversiones a un horizonte de 20 años de previsibilidad”.
Al referirse a probables cortes de energía en el verano, señaló que se intentará reemplazar la distribución faltante de usinas hidroeléctricas por la que funcionan a gas.
“Este verano no tuvimos conflictos, pero hay que seguir trabajando mucho porque hay mucha inversión que no se hizo en el pasado”, indicó.
El funcionario explicó que la bajante del río Paraná afecta a la producción de energía hidroeléctrica, por lo cual “hay menos generación de la que queremos, pero mientras más gas podamos tener, vamos a poder reemplazar los niveles faltantes”