El Fondo Monetario Internacional (FMI) aseguró hoy que la Argentina puede cerrar un acuerdo con el organismo “cuando lo crea conveniente”, al destacar que las negociaciones entre las partes avanzaron “de manera muy importante”.
“Estamos con una plataforma de entendimiento sobre la cual podemos avanzar muy rápidamente en el medida en que se decida tener un acuerdo relativamente rápido”, indicó.
El director del Hemisferio Occidental del Fondo, Alejandro Werner, afirmó que “se está trabajando de manera muy constructiva y se están llevando a cabo negociaciones concretas que, básicamente, ponen al Gobierno argentino en posición de poder cerrar un acuerdo cuando lo crea conveniente”.
“En términos técnicos, hay mucho trabajo avanzado”, enfatizó en declaraciones a la prensa, mientras el ministro de Economía, Martín Guzmán, se encuentra de viaje por Europa para lograr apoyo en la negociación de la deuda con el Fondo y el Club de París.
Resaltó además que “las negociaciones y el trabajo técnico han avanzado de manera muy importante”, al tiempo que señaló que “los trabajos se llevan a cabo de manera continua”.
Evaluó que “la decisión” respecto de cuándo se llegará a un entendimiento “está mucho más del lado de las autoridades argentinas” que del FMI.
De ese modo, insistió: “Ellos decidirán, entendiendo de manera clara, el entorno en el cual se toman estas decisiones y cuál es el mejor momento”.
“No estoy en posición exactamente para decir cuándo es el mejor momento”, manifestó Werner.
Además, el representante del FMI se refirió al Índice de Precios al Consumidor en el país y analizó que “una economía con inflación elevada genera preocupación”.
“Ha sido elevada durante los último cuatro años y para bajarla hay que implementar políticas macroeconómicas conducentes y medidas que ayuden a la coordinación de expectativas a un nivel más bajo”, recomendó. .
Anteriormente, Geoffrey Okamoto, vicedirector ejecutivo y segundo de Kristalina Georgieva consideró que más allá de que se apruebe la reasignación de fondos frescos para la Argentina, eso no reemplazará la necesidad de que el país encare reformas estructurales en el marco de programas acordados con ese organismo multilateral.
Okamoto aclaró que los u$s 650.000 millones en Derechos Especiales de Giro (DEG) que prevé inyectar el organismo a sus países miembro tendrán el objetivo de ser utilizados en “temas de salud y vacunación contra el Covid”.
Si esa será la condición, la Argentina no podría utilizar esos fondos para saldar vencimientos previstos para septiembre y diciembre de este año con el FMI.
El número dos del Fondo Monetario aclaró que los DEG son para “adecuación de reservas, no para suplantar tramos de programas o préstamos del FMI que apoyan programas de reforma estructurales en los países”.
El proceso de reasignación ahora se encuentra bajo análisis y debe ser aprobado por el board de gobernadores del organismo.
El portavoz del FMI, Gerry Rice, estimó que no sería aprobado antes de julio próximo.