Durante los últimos treinta días, los bancos argentinos fueron los protagonistas de una fuerte volatilidad bursátil, reflejo directo de la incertidumbre que generan las elecciones legislativas de medio término. Octubre combinó expectativas divididas, fuga hacia activos dolarizados y una oleada de especulación sobre la capacidad del oficialismo de sostener su programa económico liberal.
Bancos bajo presión política
El mercado operó con extrema cautela ante los comicios que definirán el equilibrio de poder en el Congreso, una instancia clave para el presidente Javier Milei y su plan de reformas estructurales. El riesgo país volvió a superar los 1.000 puntos básicos y el Merval en dólares cayó más de 44% en lo que va del año, castigando en particular a las acciones bancarias, las más sensibles al cambio político. Los inversores locales e internacionales temen un Congreso fragmentado que complique la agenda de liberalización, aumentando la percepción de riesgo regulatorio y financiero.
Rendimiento y contraste entre bancos
En ese contexto, la performance de las entidades fue dispar. Banco Galicia y Banco Macro, integrantes del panel líder, alternaron semanas de pérdidas con tímidas recuperaciones técnicas impulsadas por cobertura de posiciones. Sin embargo, en el panel general, instituciones medianas como Banco Patagonia (+14,9%) y Banco Hipotecario (+13,4%) lograron avances significativos en octubre, destacando entre las cinco acciones más rentables del mes junto a San Miguel e Inversora Juramento, según la prensa especializada. Esta mejora respondió a compras especulativas previas a las elecciones y a una leve recuperación del crédito corporativo.
Perspectiva internacional y análisis de fondos
JP Morgan, en su informe difundido esta semana, calificó al mercado argentino como “debilitado por la incertidumbre electoral” pero con asimetrías atractivas. El banco de inversión remarcó que los sectores de energía y finanzas concentran las mayores oportunidades de revalorización si La Libertad Avanza logra consolidar gobernabilidad legislativa. Estimó que Milei podría alcanzar cerca del 35% de los votos nacionales y superar el umbral de 86 diputados, escenario que “disiparía parte de la preocupación del mercado”. Aun así, el informe advierte que la dinámica del peso —que perdió alrededor del 10% en el año— y la falta de liquidez global limitan el potencial de rally inmediato.
Volatilidad y reacomodamiento local
En la plaza doméstica, el comportamiento de los bancos también estuvo condicionado por las decisiones de política monetaria. Las tasas de interés subieron en semanas recientes —Banco Nación paga 44% anual para plazo fijo, mientras Galicia ofrece 41%— lo que encarece el crédito e impacta sobre el negocio financiero. Además, las operaciones hipotecarias se redujeron drásticamente por la volatilidad cambiaria y la incertidumbre post-electoral, según un relevamiento.
Mirada a corto plazo
Con la elección a días, el destino de los activos financieros argentinos dependerá del margen político que obtenga el gobierno libertario. Si Milei logra ampliar su base legislativa, el sector bancario podría liderar una recuperación favorecida por la apertura cambiaria y una eventual normalización de tasas. Si el resultado es adverso, los analistas no descartan una nueva oleada de ventas y presión sobre el Merval, sosteniendo a los bancos argentinos en el centro de la tormenta electoral.
fuente NA
