CARIGNANO AFIRMÓ QUE “A PARTIR DEL 6 DE SEPTIEMBRE”, EL CUPO DIARIO DE INGRESOS AL PAÍS “ESTÁ PENSADO QUE SEA 2300 PERSONAS”

La directora nacional de Migraciones, Florencia Carignano, afirmó hoy que “a partir del 6 de septiembre”, el cupo diario de ingresos a la Argentina “está pensado que sea 2300 personas”, pero aclaró que “no va a ser sólo por Ezeiza” sino que se buscará “habilitar otros aeropuertos internacionales” del país.

   “A partir del 6 de septiembre, el cupo se está pensado que sea 2300 personas, pero con una condición que es que las aerolíneas tengan dos horas de diferencia entre cada vuelo para que todas las personas puedan hisoparse en tiempo y forma”, resaltó Carignano.

   En declaraciones radiales, la titular de Migraciones aclaró que se el cupo se podría aumentar en septiembre, pero el ingreso al país “no va a ser sólo por Ezeiza”, sino que se buscará “habilitar otros aeropuertos internacionales” de la Argentina.

   “Para poder ampliar el cupo y seguir con los controles necesitamos habilitar otros aeropuertos internacionales, como por ejemplo Córdoba, Mendoza, Rosario. Siempre y cuando los gobernadores presenten los protocolos”, explicó la funcionaria nacional.

   Carignano también anunció que habrá vuelos especiales para los argentinos que no hayan podido retornar al país, y puntualizó que “Estados Unidos y Europa” es donde más argentinos hay, por lo que los vuelos especiales serán desde esos destinos.

   “La Decisión Administrativa dice que va a haber dos etapas. La primera de 1700 personas más vuelos especiales ¿Qué significa esto? Vamos a establecer los lugares donde está la mayor cantidad de argentinos que no han podido retornar todavía, por lo que vamos a disponer de vuelos especiales para que puedan retornar”, detalló.

   En esa línea, la titular de Migraciones afirmó que la situación sanitaria es “mucho mejor”, y explicó: “Pudimos tomar estas medidas porque los contagios bajaron, porque la cuarentena de quienes retornan al país se empezó a cumplir, y porque empezamos a vacunar”.

   “Durante todo este tiempo me tocó dar malas noticias, que era justamente endurecer las medidas para en algún momento poder abrir. Sabíamos que iba a llegar el momento”, manifestó.

   Por último, aclaró que las flexibilizaciones se llevan adelante porque “bajan” los números de fallecidos y casos de coronavirus en la Argentina.