SENADO: LA OPOSICIÓN RECHAZÓ A UN ASPIRANTE A CAMARISTA QUE HABÍA DENUNCIADO A RODRÍGUEZ SIMÓN

La Comisión de Acuerdos del Senado se reunió ayer de forma virtual para evaluar una larga lista de pliegos judiciales y el encuentro terminó con una polémica entre Juntos por el Cambio y el fiscal Gabriel de Vedia, a quien interrogaron sobre una denuncia mediática que hizo en 2020 contra Fabián “Pepín” Rodríguez Simón.

   De Vedia, ahora propuesto para el cargo de vocal de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo en la Ciudad de Buenos Aires, había dicho que en 2017 mantuvo una reunión con el ex asesor de Mauricio Macri en la que -siempre según su versión- Rodríguez Simón le habría adelantado la intención del Gobierno de “meter presa” a la entonces procuradora general, Alejandra Gils Carbó.

   En la audiencia de la Comisión de Acuerdos, la oposición no dejó pasar la oportunidad de interrogar a De Vedia sobre aquella denuncia al tiempo que remarcaron que “al día de la fecha no ha hecho ninguna presentación judicial”, como subrayó la senadora Guadalupe Tagliaferri.

   En ese sentido, la legisladora le preguntó al candidato a camarista, entre otras cosas, “cómo se concertó esa supuesta reunión” de 2017 y “por qué tardó tres años y medio para hacer público” ese encuentro su contenido.

   De Vedia afirmó que “la reunión existió, no fue supuesta, fue real” y la impulsó él mismo, al tiempo que defendió la tarea de Gils Carbó al frente de la Procuración General y señaló que “veía que esa persecución le generaba (a Gilis Carbó) tristeza y preocupación para llevar adelante su tarea en esa embestida”.

   “En ese marco apreció el celular de una de sus hijas en un medio periodístico. Entonces yo pensé en que algo tenía que hacer para colaborar”, agregó De Vedia, al tiempo que contó que luego de contactarse con Rodríguez Simón por Whatsapp mantuvieron una reunión donde estuvieron “los dos solos”.

   Según relató ante la Comisión de Acuerdos, le preguntó a Rodríguez Simón cómo podía concluir la presión sobre Gils Carbó y el entonces asesor de Macri le respondió: “Si me traés la renuncia de la procuradora, esto se acaba acá”.

   De Vedia afirmó que le dijo al entonces funcionario que Gils Carbó no iba a renunciar, ante lo cual Rodríguez Simón -siempre de acuerdo a la versión que dio ante los senadores- le respondió: “Entonces meteremos presas a las hijas y a ella”.

   Además, el fiscal y ahora candidato a vocal de cámara negó haberse propuesto él mismo como procurador general ante Rodríguez Simón, algo sobre lo que Tagliaferri también lo había interrogado.

   Por otra parte, De Vedia dijo que no había denunciado la situación ante la Justicia porque “si alguien tenía que denunciarlo era ella”, en referencia a la ex procuradora general de la Nación.

   Luego intercedió la senadora Laura Rodríguez Machado, también de Juntos por el Cambio, quien machacó sobre la denuncia “tardía” al tiempo que subrayó como personal del Poder Judicial tenía la obligación de presentarse ante la Justicia si creía que se estaba dando un hecho ilícito.

   “Si no, son meras manifestaciones políticas en programas que tienen un fuerte sesgo político. Eso demuestra que no hay imparcialidad en sus opiniones”, sostuvo Rodríguez Machado ante De Vedia.

   La senadora cordobesa adelantó que para la bancada opositora De Vedia había sido “absolutamente parcial” por “no denunciar, como hombre de derecho, ante un hecho ilícito, y sí hacerlo de manera política ante un programa”.

   “Y en segundo lugar decirle que usted con esa declaración logró un avance que beneficia a Gils Carbó, para que su recusación fuera motivo dentro del expediente”, agregó la legisladora de la oposición.

   De Vedia insistió en que él había querido “darle una mano a la procuradora” y agregó: “Si analizan mis denuncias, van a ver que siempre le doy importancia a la verdad jurídica objetiva.

  Yo tenía una circunstancia que podía esclarecer, aportar un elemento para que el Poder Judicial diga que la procuradora fue víctima de determinada circunstancia”.

   Actualmente Rodríguez Simón se encuentra en Uruguay, donde pidió “asilo político” por considerar que hay una “persecución” en su contra debido a la causa que lleva adelante la jueza María Servini, en la que se lo investiga por presunta asociación ilícita y extorsión.